Papiloma en el pie o verruga plantar: qué es, cómo prevenir y tratamiento

Hoy volveremos a realizar un repaso sobre qué es el papiloma en el pie, o también conocida como verruga plantar, por qué se produce, cómo afecta tanto a la población general como a nivel deportivo, y cómo se pueden tratar y prevenir.

El papiloma en el pie o verruga plantar (también llamado ojo de pescado en algunos lugares) es una patología o lesión tan común en la población general o deportista como los hongos en los pies: es fácil sufrirlos, pero igual de fácil pueden prevenirse, así que si es tu caso, calma que tiene solución.

En ambos casos se trata de enfermedades causadas por microorganismos (hongos o virus, respectivamente), pero el problema esencial para que se produzcan y se traten erróneamente suele ser la confusión en su diagnóstico. Un papiloma plantar no es un callo, y por tanto hará falta un tratamiento diferente contra el mismo.

Papiloma en el pie o verruga plantar: qué es y por qué aparece

El papiloma en el pie o verruga plantar son denominaciones para una misma enfermedad: se trata de una infección vírica, en este caso provocada por el virus del papiloma humano o VPH. Sí, es el mismo virus causante de las conocidas verrugas genitales, pero no se trata de la misma cepa.

Como sucede con otros virus, el virus del papiloma humano tiene diferentes cepas, y algunas suelen causar enfermedad en unas zonas determinadas, como es el caso de los pies. De hecho, la denominación “papiloma” se debe precisamente al VPH, aunque en este caso se suele hablar más de verruga plantar para evitar confusiones.

A diferencia de otras lesiones, la verruga plantar se parece a una coliflor con puntos negros que pueden sangrar. Es dolorosa al pellizcarla, pero no al presionarla; sin embargo, dado que la zona es la planta del pie, sí provoca molestias y dolor a la presión del peso del mismo pie.

Los papilomas en el pie o verrugas plantares pueden ser únicos o múltiples, y tienen una extensión y profundidad diferente: a mayor profundidad puede haber más dolor. Y por supuesto se pueden contagiar.

Posibles causas de un Papiloma en el pie

A diferencia de las uñas negras o los hongos en los pies, que suelen surgir al producirse una humedad excesiva en el pie si se deben a hongos (aunque también pueden contagiarse en duchas públicas, por ejemplo), la causa principal para sufrir una verruga plantar es el contagio directo a través de grietas o heridas en la piel del pie.

Sin embargo, la aparición de un papiloma plantar o verruga plantar no es tan rápido como una onicomicosis u hongo en el pie: puede tardar entre 1 y 6 meses en producir síntomas, y la humedad también potencia su aparición, junto a una mala higiene o un sistema inmune debilitado.

Cómo prevenir la verruga plantar

A diferencia de los hongos en los pies, el papiloma en el pie se produce exclusivamente por contagio. No poseemos virus del papiloma humano sobre la piel de forma natural, pero hongos sí.

En ambos casos la humedad es un factor que potenciaría la infección, pero los hongos ya viven sobre la piel y simplemente se reproducirán en exceso ante dicha situación, el papiloma plantar debe contagiarse de una persona a otra previamente.

Aún así, las medidas de prevención tanto para hongos como para verrugas plantares serán similares:

• Evitar ir descalzos en lugares húmedos públicos, como vestuarios de gimnasios, piscinas o duchas públicas. Contagiarse con el virus del papiloma humano es muy fácil, y más si hay humedad de por medio con un tránsito de gente continuado.
• Llevar a cabo una correcta higiene de pies. Y no solo lavándolos bien, algo que no debe realizarse en exceso porque implica más humedad; sino también llevando a cabo un secado adecuado de los pies y sobre todo de los dedos. Hay que evitar la humedad todo lo posible.
• Cambiar los zapatos y calcetines frecuentemente: si la actividad es muy intensiva mejor no repetir calzado dos días seguidos, dejando que se aireen entre un uso y otro. Respecto a los calcetines, mejor si son de algodón, y mejor cambiarlos dos veces al día si se suda en exceso.
• Cuidados de las heridas: si se sufren grietas en los pies o pequeñas heridas de forma habitual, hay que extremar las precauciones. Se trata de claros puntos de entrada para cualquier infección en el pie, incluyendo las verrugas plantares.

Papiloma plantar: tratamiento

El primer paso a seguir como tratamiento de una verruga plantar es ponerse en manos de un profesional: no hay remedios caseros o consejos de vecinos que valgan contra una infección por virus tan fácil de sufrir y difícil de erradicar.

Aunque lo habitual es pensar en acudir al médico de familia o al dermatólogo, no hay que olvidar que los podólogos son los mayores expertos en pies. Veamos algunos de los tratamientos que suelen usarse, siempre, insisto, a cargo de un profesional.

• Quemadura química: mediante ácido nítrico, salicílico o láctico, entre otros ejemplos. Es un tipo de tratamiento que también se usa para otros tipos de verrugas, aunque el papiloma plantar es más complejo y requerirá curas posteriores.
• Quemadura con láser: el uso de láser sería una forma de quemadura por calor, controlada, que también requeriría curas posteriores al tratamiento.
• Uso de vesicantes: sustancias como la cantaridina o la bleomicina pueden provocar también quemaduras de la verruga, aunque se trata de tratamientos más agresivos y pueden llegar a provocar úlceras en la zona. Sería un tratamiento enfocado a verrugas múltiples o más profundas.
• Cirugía: sería el tratamiento más extremo cuando los tratamientos previos no han funcionado. No es el más común.

Para terminar, como ya hemos comentado al principio, cabe recordar que una verruga plantar no es un callo ni una zona de roce: los callicidas estarían completamente desaconsejados e incluso pueden provocar graves complicaciones. Una vez más, ante la duda, el primer paso es consultar con un profesional.